La cata de café es uno de los momentos más destacados de la feria, ya que permite a los participantes descubrir y comprender las características únicas de cada grano. Este proceso delicado consiste en preparar el café a una temperatura precisa que no excede los 32 grados centígrados. La experiencia comienza con una apreciación profunda de su aroma, para luego continuar con la degustación en el paladar, donde se revelan los matices y perfiles de sabor que definen a cada variedad.

En el contexto de esta experiencia sensorial, el concurso *Cata de café Barista Master* cobra gran importancia, ya que premia al catador que demuestra un conocimiento excepcional, una sensibilidad refinada y una verdadera pasión por el café. Este reconocimiento es uno de los más codiciados, ya que refleja la maestría y dedicación que hay detrás de cada taza.